Innovación para reducir el desperdicio de queso

Nuestra gama de cultivos naturales ayuda a los fabricantes de queso —y a los consumidores— a hacer frente al dilema de los alimentos desperdiciados.

La disminución del desperdicio de alimentos ha sido identificada por la ONU como objetivo mundial para el desarrollo sostenible. Si bien la concienciación de los consumidores sobre el impacto del desperdicio va en aumento, un estudio publicado en 2016 mostraba que solo el 53 % de los consumidores estadounidenses1 sabían de ese problema, aun cuando cada año tiran unos 36.000 millones de kilos de comida. Puesto que gran parte de ese desperdicio tiene que ver con la caducidad, ¿cómo pueden los fabricantes de alimentos atender la demanda de etiquetas limpias y, al mismo tiempo, conseguir que los productos se mantengan frescos más tiempo? Nuestra gama de cultivos naturales ayuda a los fabricantes de queso —y a los consumidores— a hacer frente al dilema de los alimentos desperdiciados.

Casi el 70 % de los encuestados creían que había que tirar la comida cuando llegase la fecha de caducidad para evitar intoxicaciones alimentarias, por lo que alargar la vida útil comercial puede ayudar a evitar que acaben en la basura cantidades enormes de comida. Los equipos de I+D de Chr. Hansen han desarrollado cultivos innovadores para proteger los quesos frente a levaduras, mohos y sabores indeseables. Estas soluciones naturales que proporcionan bioprotección pueden contribuir a que el queso se mantenga fresco más tiempo y siga la tendencia de las etiquetas limpias. 

Queso que se mantiene fresco y con todo su sabor

«Nuestros cultivos bioprotectores de las gamas FreshQ® y BIOSAFE™ dan un rendimiento excepcional y son muy estables», afirma Morten Boesen, director de marketing para quesos en Chr. Hansen. «FreshQ® resulta especialmente eficaz en la producción de queso blanco, mientras que los cultivos BIOSAFE™ se recomiendan para la elaboración de quesos de pasta dura y semidura. Gracias a ellos, muchos más consumidores de todo el mundo pueden disfrutar de quesos frescos y naturales durante más tiempo».

FreshQ® inhibe o pospone la proliferación de levaduras y mohos, que son las causas más habituales de deterioro en los productos queseros. Los cultivos protegen la calidad a lo largo de toda la cadena de suministro, lo que resulta especialmente ventajoso en zonas donde es difícil garantizar una refrigeración óptima. Los cultivos BIOSAFE™ impiden la hinchazón tardía y los sabores anormales causados por las bacterias del género Clostridia presentes en la leche, y también pueden ayudar a mejorar el perfil organoléptico del queso.

Innovación impulsada por los consumidores

«La concienciación sobre el desperdicio de alimentos entre los consumidores va en aumento y a nadie le gusta tirar productos sin abrir. Nuestro objeto con los cultivos FreshQ® y BIOSAFE™ es ayudar a los fabricantes de queso del mundo entero a ofrecer productos más duraderos y con todo su sabor a los consumidores, sin poner en riesgo sus etiquetas», afirma Morten Boesen. «Ahora son todavía más los consumidores que pueden disfrutar de quesos deliciosos más duraderos, con un sabor excelente y sin conservantes artificiales no deseados».

Chr. Hansen ofrece cultivos bioprotectores que mantienen frescos y seguros los productos lácteos, cárnicos, de salmón ahumado y ensaladas listas para consumir.


1Household Food Waste: Multivariate Regression and Principal Components Analyses of Awareness and Attitudes among U.S. Consumers. Artículo de investigación publicado en PLOS el 21 de julio de 2016.

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